domingo, 20 de octubre de 2013

HACE SETENTA AÑOS… BREVE HISTORIA DE LA FUNDACION DE LA BUENA MUERTE DE CÓRDOBA (1943-1955)


Editorial: Punto Rojo Libros S.L.
Año de publicación: 2013
Autores: José Alfonso Capdevila Gómez y Eduardo Capdevila González




Poco a poco vamos llenando esta biblioteca básica del cofrade cordobés y para ello, en esta ocasión, os traemos un libro de muy reciente publicación. El título ya lo dice todo y es que hablamos de una obra centrada en la etapa fundacional de la Hermandad de la Buena Muerte. Como decimos ha visto la luz hace muy poquito, concretamente el pasado 13 de septiembre, y podríamos decir que de manera bastante desaperciba ya que lo hacia en la jornada previa al Vía Crucis Magno de la Fe en el que se centraban todas las atenciones cofrades.

La obra pone su granito de arena para cubrir ese hueco que es la historia de muchas cofradías cordobesas, ya sean de origen antiguo o moderno. Y es que pese a la existencia de obras publicadas de carácter más global y que ofrecen la historia de todas las cofradías de manera bastante resumida - con grandes lagunas en ocasiones -, las monografías detalladas son aún por desgracia escasas. La verdad es que se echan en falta obras dedicadas a hermandades con mucha solera como las del Cristo de Gracia, Calvario, Huerto, Pasión, Prendimiento, Resucitado o al Santo Sepulcro. Y esto sólo por dar algunos ejemplos ya que sabemos que faltan unas cuantas cofradías más. Incluso cofradías nacidas en los años 70 u 80 ya merecerían desvelar detalles de su reciente pasado. En fin, quizás ya se cuece alguna publicación y si no es así, ojalá este artículo sirva para animar a que surjan nuevas investigaciones.

Pero centrémonos en la obra que nos ocupa. Octubre de 1943: ese es el punto de partida de la cofradía de la Buena Muerte y de esta obra que desgrana a partir de esta fecha todo lo acontecido en esta hermandad hasta mediados de los años cincuenta. Se trata de un periodo breve pero muy intenso en el que sus fundadores logran dar forma a la cofradía que conocemos hoy.

Nosotros nos quedamos con los nombres. Además del padre, superior de los Jesuitas, José Fernández Cuenca, impulsor del nacimiento de la cofradía, tres nombres destacan en esta etapa de entre la profusa relación que nos proporciona la obra: el cordobés Enrique Luque Ruiz y los hispalenses José Barea Saborido y Cristóbal Losana Cotalero. Conoceremos de ellos algunos datos biográficos y de personalidad así como la importante labor realizada a favor de su cofradía.

Conoceremos también en detalle datos de las primeras salidas procesionales y las dificultades salvadas para que se produjeran. Curioso resulta el importante acompañamiento de hermanos nazarenos que contrasta con el bastante más mermado de la actualidad. Igualmente es de resaltar todo lo relacionado con los encargos patrimoniales en los que se buscan a los grandes de la época: la imaginería de Castillo Lastrucci, los bordados de Talleres Caro y la orfebrería de los hermanos Domínguez. La influencia sevillana en todos los aspectos de la cofradía es más que patente y este libro nos desvela el porque y como llega a ser motivo de tensiones en el seno corporación.

El libro también nos deja algunas interesantes curiosidades. ¿Sabías, por ejemplo, que la primera estación penitencial de un hermano de la Buena Muerte de Córdoba con hábito nazareno no se produjo en Córdoba? ¿O que entre alguno de los fundadores existía la idea de no constituirse precisamente como cofradía de absoluto silencio? Todo esto así como desmontar algunos datos erróneos o mitos asumidos popularmente, conforman este trabajo.

Aunque no existe un índice como tal, si que existe una estructuración por capítulos que pasamos a detallar en cuanto a cabeceras y contenidos:

1.- En el principio era el verbo.

Fundación de la cofradía, el encargo para la talla de las imágenes titulares y las primeras reglas.

2.- “Según nuestras noticias la cofradía no efectuará aún en el presente año su desfile procesional…”

El diseño y encargo para la talla del paso de Cristo, diseño de las primeras insignias y las peripecias de la primera salida penitencial en 1946.

3.- “Para sumar quebrados hay que partir del mínimo común múltiplo.”

Consecución de las primeras insignias del guión procesional y los primeros pasos del palio de la Reina de los Mártires.

4.- “De Caro he traído una pequeña muestra sin importancia (cómo será lo demás) para que vean algunos hermanos la fantasía en Do mayor que va a resultar el manto.”

La realización del proyecto de paso palio, la singularidad del Simpecado, la primera salida procesional de la Reina de los Mártires en 1951 y como se solucionó la primera situación de quiebra económica de la cofradía.

5.- “Te supongo advertido de mi deseo, varias veces reiterado desde este verano, de presentar mi renuncia formal al cargo de Mayordomo de nuestra Hermandad…”

La dimisión de Cristóbal Losana, su expulsión y su merecida rehabilitación y como se solventó la segunda bancarrota de la cofradía.

6.- “Efectivamente el manto “dio el golpe”… y a la Virgen la piropearon bien. Fue una verdadera pena  que Jesús Domínguez (como siempre) nos fallara…”

La etapa de la nueva Junta de Gobierno con la ausencia de los fundadores, la modificación de las Reglas Fundacionales y los vaivenes en el diseño del techo de palio, obra única en el mundo.

7.- “Y por fin, cuantos sacrificios y actividades se emplearon se vieron recompensados en la mañana de 11 de marzo de 1945 cuando se expusieron, para su bendición, las imágenes…a los ojos del pueblo del pueblo de Córdoba. Y lo que esos ojos vieron. Y lo que tendrían que ver otros venideros.”
Conclusión de los autores y despedida de la obra.

En definitiva, nos encontramos ante una obra ciertamente interesantísima y amena, en la que únicamente echamos en falta una mayor selección fotográfica. Por último indicar que se puede adquirir en la propia sede de la cofradía o enviando un mensaje privado al Facebook de la hermandad – según se indica en la propia página de Facebook de la cofradía –. También es posible en algún establecimiento especializado cordobés como por ejemplo la Librería Luque y cabe mencionar además que el beneficio de su venta así como los derechos de propiedad intelectual están cedidos a Cáritas Diocesana.

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